martes, 14 de junio de 2011

ECLIPSE TOTAL DE SOL

Cuenta Augusto Monterroso, en un microrelato titulado “El eclipse”, la peripecia de un fraile que, perdido en la selva de Guatemala y resignado a morir, se queda dormido; cuando despierta, está rodeado de indígenas que preparan un altar para su sacrificio. Dado  su conocimiento de Aristóteles y de algunas lenguas de la zona, les explica cómo ese día se producirá un eclipse total de sol. Los nativos hablan entre ellos, pero lo sacrifican; y, mientras la sangre chorrea por el ara, una voz va recitando las fechas de todos los eclipses de sol y luna que ya figuraban en los códices mayas, “sin la valiosa ayuda de Aristóteles” -termina Monterroso-.
El pobre fraile confiaba en la superioridad de su cultura frente a la ignorancia de aquellos “salvajes”. Han pasado cinco siglos, pero sigue habiendo españoles con el sentimiento de supremacía frente a  los extranjeros, para los que no sólo son ignorantes, sino delincuentes, y por ello han elegido como alcalde de Badalona al xenófobo Xavier García Albiol, el cual sostiene que los gitanos rumanos son “una plaga”, que “hay que cortarles las alas a los que no se adaptan” y otras lindezas. Y, como lleva años preparándose para ser alcalde de su ciudad -donde no había problemas de convivencia-, ya hace tiempo que sembró la discordia, repartiendo panfletos contra los rumanos. Y está tan ufano, que se lo ve en una foto de la toma de posesión besando la vara de mando, ridículamente.

miércoles, 8 de junio de 2011

LO QUE ESTÁ MAL EN EL MUNDO

"Mi niña en el balcón" José García Agüero (Almería)

Mi amigo el poeta Luis Melgarejo, que regenta “La casa con libros” en La Zubia (Granada), me regaló una serie de postales diseñadas y publicadas por él, donde se  anuncian los actos que tienen lugar en la casa durante el curso. Melgarejo posee el buen gusto de reproducir en ellas textos de interés. Esta última serie anuncia el ciclo “Poesía en resistencia”, que abarcará los días 9, 10 y 11 de junio, a las 9 de la noche.

Al leer las tarjetas me deslumbra el escritor inglés Chesterton con un texto que me tomo prestado. Así que esta entrada me la dan hecha él y Melgarejo.
Escribe  Gilbert Heith Chesterton (1874 - 1936):

Lo que está mal en el mundo
Hay que empezar por algún sitio y yo empiezo por el pelo de una niña. Cualquier otra cosa es mala, pero el orgullo que siente una buena madre por la belleza de su hija es bueno. Es una de esas ternuras que son inexorables y que son la piedra de toque de toda época y raza. Si hay otras cosas en su contra, hay que acabar con esas otras cosas. Si los terratenientes, las leyes y  las ciencias están en su contra, habrá que acabar con los terratenientes, las leyes y las ciencias.
Con el pelo rojo de una golfilla del arroyo prenderé fuego a toda la civilización moderna. Porque una niña debe tener el pelo largo, debe tener el pelo limpio. Porque debe tener el pelo limpio, no debe tener un hogar sucio; porque no debe tener un hogar sucio, debe tener una madre libre y disponible; porque debe tener una madre libre, no debe tener un terrate­niente usurero; porque no debe haber un terrateniente usurero, debe haber una redistribución de la propiedad; porque debe haber una distribución de la propie­dad, debe haber una revolución.
La pequeña golfilla del pelo rojo, a la que acabo de ver pasar junto a mi casa, no debe ser afeitada, ni lisiada, ni alterada; su pelo no debe ser cortado como el de un convicto; todos los reinos de la tierra deben ser mutilados y destrozados para servirle a ella. Ella es la imagen humana y sagrada; a su alrededor la trama social debe oscilar, romperse y caer; los pilares de la sociedad vacilarán y los tejados más antiguos caerán, pero no habrá de dañarse un pelo de su cabeza.


lunes, 6 de junio de 2011

MEDIA HORA LIBRE

 Fuentevaqueros, 5 del VI de 1976
“Eran las cinco en punto de la tarde” cuando en la plaza de Fuente Vaqueros ya no cabían los cerca de 10.000 demócratas -como se decía entonces- reunidos allí para celebrar el primer homenaje a Federico García Lorca, bajo el nombre de “El 5 a las 5”. Hace 35 años. Era una calurosa tarde y disponíamos de sólo media hora: “la primera media hora libre” de la transición, una fiesta por la libertad. Desde un pequeño escenario comenzó a hablar Francisco Fernández Montesinos, sobrino del poeta, Aurora Bautista (la famosa reina Juana de “Locura de amor”) recitó poemas de Lorca.
Aurora Bautista, "5 a las 5"
Alguien leyó un texto de Alberti (o quizá fuera una grabación) que envió desde su exilio en Roma. Desde la lejanía de la alargada plaza se podía contemplar la venerable cabeza de Blas de Otero recitando poemas conocidos por la mayoría de los presentes. 
Blas de Otero, "5 a las 5"
Y Rafael Guillén, el poeta granadino, y la actriz Lola Gaos, y José Agustín Goytisolo y Nuria Espert, que cerró el acto con una sobrecogedora lectura del “Llanto por Ignacio Sánchez Mejías”.
Se subieron al escenario más personas y a algunas les costó una multa considerable del Gobierno Civil, pues no figuraban en el programa. Pero a las cinco y media en punto se apagó el equipo de sonido, y el silencio fue colmado con poderosas voces que coreaban “Amnistía y libertad” o “Se siente, se siente, Federico está presente”. Por suerte no actuaron las fuerzas del orden, que rodeaban la plaza por todos los costados.

En la memoria de los presentes permanece aún hoy, con un regusto de orgullo, una sensación especial de miedo y valentía. Fue sólo media hora de libertad, pero intensa y emocionante.